domingo, junio 11, 2006

Karicia

.


.



Ya que el agua tomó alas

para luego caer y recorrerte.

Tú por parte, escondes y escampas

otorgando murallas por candor.

Y como más fluido un solo amor

que no conoce carne ni quiere ruinas futuras

más que cosechar ese rocío el tuyo vientre;

ese néctar y flor que ya dos soles anticipan

bajo la oscuridad más clara que te ha podido coronar.


Tenue tú también

que la letra tanto que acerca

la misma gota se vuelve, la que no te toca.

Y es amiga del no, también.



.

.